Sierra de Baza otoñal |
Jabalcón desde Barea |
Ni la lluvia otoñal, ni las
cuestas como la de Barea pueden con este aguerrido grupo de A LAS DOS EN EL
ABREVADERO. Una docena éramos esta mañana con la incorporación de Encarnita, a
la que animamos a sumarse a las aventuras. Desde el Camino del HINCHAR (que ya
lo he aprendido) hasta los pies de Barea, o Cuesta Bermeja como la llaman
algunos, ya barruntaba el mal tiempo y al final se ha “liao”, pero hemos
decidido seguir, afortunadamente, ya que al final la mañana ha sido ideal. El
recorrido por los chaparrales del sendero que sube hasta el Cortijo de Barea,
dejando a la izquierda el Barranco del Diablo, estaba
sensacional, incluso el agua lo hacía más atractivo, y Baza y Caniles se
quedaban al fondo, entre nubes, creando escenas perfectas. Las viejas paredes
del Cortijo, y los esqueléticos árboles de la puerta han sido el improvisado
comedor donde hemos repuesto fuerzas, y desde ahí, lo peor estaba superado. La
bajada por la Rambla de Granada ha sido un verdadero gustazo, las formaciones
rocosas y la vegetación autóctona animaban a los andarines. Tres horas y media,
con parada incluida, de disfrute para los sentidos sirven para decir una vez más
que las mejores cosas son gratis, y que tenemos un entorno natural envidiable.
Por las inmediaciones del Cortijo de Medina y Carrillo hemos llegado de nuevo
al llano y al punto de partida. El abrevadero nos esperaba y una cerveza y un
brindis para celebrar el esfuerzo y el final de esta segunda ruta, nos dejan
buen cuerpo para acometer el domingo próximo la subida a los prados. El
personal está fino.
A LAS DOS EN EL ABREVADERO, en Barea. |
Guardián de Barea |
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